Al  buscar el lugar donde deseamos hacer la recepción debemos tener en cuenta qué  comida vamos a ofrecer y cómo es que queremos servirla. Esto también decidirá  el lugar que definitivamente escojamos.
                                Tenemos tres opciones: Un cóctel o brindis, un buffet y una cena  plateada o servida.
                                
                                  - Cóctel o  brindis: Es una celebración sencilla donde ofrecemos comida  fácil de comer sin cubiertos y de pie. Es muy dinámica, donde lo principal es  bailar, compartir y de vez en vez algo de bebida. Aunque la mayoría estará de  pie, tenemos que disponer de algunas mesas y sillas para que puedan sentarse  algunas personas. La duración de este tipo de celebración no es muy larga.
 
                                  
                                
                                  - Buffet: Es  una comida o cena en la que todos estamos sentados, pero nos levantamos para  escoger un plato y servirnos de un surtido amplio de comidas preparadas y  presentadas en una decorada mesa. Es muy dinámica y ofrece la posibilidad de que  los invitados seleccionen lo que deseen comer y la cantidad. En las mesas deben  estar las copas y los cubiertos previamente colocados para facilitar la  movilidad al momento de servirse.
 
                                  
                                
                                  Antes del buffet podemos ofrecer un  aperitivo junto a las bebidas. Hay quienes preparan para esta ocasión una mesa  de quesos. Si tenemos prevista una fiesta de larga duración podemos ofrece  algunos canapés salados hacia el final de la fiesta.
                                   Se acostumbra que cortemos el  bizcocho bien tarde, pero si éste es el postre, podemos ofrecerlo seguido de la  comida. Como es costumbre que con el bizcocho se acaba la fiesta, tendríamos  que tener preparado algo bien movido para animar el ambiente y que la fiesta  continúe.
                                
                                
                                  - Cena plateada o servida: Esto requiere de un servicio de camareros para  servir a todas las personas sentadas en sus mesas. La ventaja es que los  invitados no tienen que preocuparse por buscar la comida. La desventaja, además  de encarecer el presupuesto, es que hace un poco monótono el momento de la  cena.